viernes, 4 de septiembre de 2009

Otro momento más para pensar


Hoy, en el silencio de la noche me invaden sentimientos y emociones incontroladas, mezclados con sonrisas y llanto.

En este instante, en esta oscuridad cegadora desnudo mi soledad, me quito la armadura y dejo que caiga junto a mis pies. Mi cuerpo se refleja en el espejo, y observo detenidamente mis ojos, detrás de ese color negro se esconden un sin fin de nuevos proyectos, y también el miedo a lo desconocido, es evidente que cuando tengo mi caparazón puesto, destilo aromas de fuerza invencible... Pero, en este momento puedo ver realmente el suspiro de mi alma, la delicadeza de mi espíritu y el escalofrío que recorre cada poro de mi cuerpo. ¿Será el miedo a lo que se avecina?...

Mi vida ha tenido sus momentos, buenos y malos. Ahora que se acerca de nuevo un cambio, puedo sentir miedo. Cada transformación que elegimos hacer en nuestra vida es para mejorar algo, para seguir creciendo y continuar.

Esta noche me hace estar reflexivo, junto a una tenue luz, mi perro (Bombón), y todos mis recuerdos alegres del pasado, en los cuales busco refugiarme por instantes, cerrando los ojos y volver a sentirlos como si los viviera. Al abrirlos de nuevo me encuentro con el silencio, mi pluma y un papel, mis compañeros de hace algún tiempo que me han ayudado a encontrarme de nuevo, buscando luz, para seguir abriendo caminos.

1 comentario:

  1. Sabés... pienso que muchas veces a mi me pasa algo parecido... Cuando las cosas andan no tan bien, cuando me siento medio perdida, recurro a algunos recuerdos, experiencias o lecciones que la gente ha dejado en mí a travás del tiempo y, muchas veces, eso es lo que me ayuda a salir adelante, a encontrar la luz en la oscuridad...

    ResponderEliminar